Charly García, mi nervio

Desde Say No More como punto de partida recordé la primera sensación que tuve al ver a García por primera vez. Entonces tuvo lugar la definición de por qué siento a García como un nervio, como mí nervio, porque de él adopté como sonó también en Reloj de Plastilina que salgo a caminar y sigo imaginando porque fui lo que creí y soy lo que está pasando. Entonces recordé una carta que escribí en la que jugaba a vestirme de Piano Bar porque alguna vez Tuve tu Amor. Hablé de una pequeña teoría de su genio reluciendo la intervalencia de las palabras, desde el "hubo" primera palabra de su primera canción en Sui Generis en adelante como gesto manifiesto de ser catalizador y disyuntor de la realidad atmosférica que él también habita. Después de avisar que de Seru en esencia sobrevolará y que La máquina como capítulo aparte tendrá lugar otra vez, pero habiendo presionado para que suene como coda de este viaje de García a través de mi cuerpo llegó la gema instrumental, porque cada quien cada vez que oye esta canción se pone de pie(l), porque suena Pubis Angelical. El cuerpo como canal que vibra y la sangre que bulle dentro y la sensación sintomática de vibrar y ser canción, experiencia que nos desnuda y nos desviste tan rápidamente que no se puede dejar de sonreír y entonces el tiempo vuelve a pasar y cuando se tiene la sensación de que no hay primavera suena Anhedonia y te das cuenta de que el amor cambia tu sangre. Y si te quedaste con ganas de más, no pasa nada... hay recompensar Por probar el vino y el agua salada. Leer más

Desde Say No More como punto de partida recordé la primera sensación que tuve al ver a García por primera vez. Entonces tuvo lugar la definición de por qué siento a García como un nervio, como mí nervio, porque de él adopté como sonó también en Reloj de Plastilina que salgo a caminar y sigo imaginando porque fui lo que creí y soy lo que está pasando. Entonces recordé una carta que escribí en la que jugaba a vestirme de Piano Bar porque alguna vez Tuve tu Amor. Hablé de una pequeña teoría de su genio reluciendo la intervalencia de las palabras, desde el "hubo" primera palabra de su primera canción en Sui Generis en adelante como gesto manifiesto de ser catalizador y disyuntor de la realidad atmosférica que él también habita. Después de avisar que de Seru en esencia sobrevolará y que La máquina como capítulo aparte tendrá lugar otra vez, pero habiendo presionado para que suene como coda de este viaje de García a través de mi cuerpo llegó la gema instrumental, porque cada quien cada vez que oye esta canción se pone de pie(l), porque suena Pubis Angelical. El cuerpo como canal que vibra y la sangre que bulle dentro y la sensación sintomática de vibrar y ser canción, experiencia que nos desnuda y nos desviste tan rápidamente que no se puede dejar de sonreír y entonces el tiempo vuelve a pasar y cuando se tiene la sensación de que no hay primavera suena Anhedonia y te das cuenta de que el amor cambia tu sangre. Y si te quedaste con ganas de más, no pasa nada... hay recompensar Por probar el vino y el agua salada. Leer menos