November 16, 2024 15:09
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La condena jurídico mediática a CFK, preanunciada con bombos y platillos y transmitida para solaz del paladar Libertario, hizo vivir a la tenue Democracia Argentina uno de los momentos más difíciles desde la última dictadura militar. El Partido judicial consumó la profecía de Magnetto, y el fallo salió. Nada nuevo, diría Cristina, el Peronismo lo ha vivido a lo largo de su historia. Las fuerzas populares, capaces de resistencia y de amor y gratitud sin fisuras hacia quien les diera la década ganada en dignidad e igualdad de oportunidades, asistieron a una extraordinaria clase pública frente a los Tribunales Federales. Valía la pena escuchar a Juan Grabois, Juan Martín Mena, Manuela Dávila y Anabella Luccardi explicar cómo funcionan el Lawfare, el Poder Real, y la Mafia Judicial, encarnecidos contra nuestra líder. Dicho esto, y porque tenemos futuro y todo por ganar, me permito reflexionar que esta resistencia necesita del ordenamiento al interior del campo popular para construir el proyecto de poder que contenga a todos y todas. Hay mucho por hacer, pensar, proyectar, y es urgente hacerlo, sin egoísmos ni intereses personales. PRIMERO ESTA LA PATRIA. Milei asumió como jefe del Anarco Capitalismo Libertario rodeado de un halo de misterio que tenía que ver, de un lado, con la incredulidad de muchos que suponían que el personaje que encarnaba era una impostura para instalar al che pibe de Eurnekian. Y, del otro lado, algunos tenían cierta esperanza de que pondría fin a un arco variopinto de reclamos que podrían describirse en los Aranceles sobre las Agroexportadoras o las regulaciones y medidas proteccionistas tendientes a frenar la fuga y la timba financiera. Los impuestos a las grandes fortunas y a la Renta extraordinaria, fueron asimilados por los voceros de los multimedios al peso impositivo que ajustaba a una Pyme, o sobre el deseo de vacacionar en el exterior de una familia promedio, y a la economía informal que hace vivir al día a la mitad de la población trabajadora. Hoy el ciclo de Milei comienza a presentar signos de madurez, que obligan al susodicho a subir la apuesta de la desvergüenza. Arrastrado y bufonesco ante un divertido Donald Trump, Milei muestra que es capaz de hundir la tradición nacional respetuosa de los derechos de los pueblos originarios, contra la erradicación de la violencia hacia las mujeres, negacionista de la ultima dictadura, y por sus políticas hacia niños y adolescentes. Con niveles históricos de pobreza e indigencia, desocupación creciente, aumento de la informalidad, cierre de pymes, y la huída de las empresas extranjeras, en Argentina todo se resume a extractivismo y timba, a la espera que los dólares de Trump le den un respiro a este gobierno. Mientras tanto, las organizaciones sociales, gremiales y políticas representativas marchan, se encuentran, se organizan, y traban alianzas. Porque, nadie se salva solo. Solo el pueblo salvará al pueblo. Leer más
La condena jurídico mediática a CFK, preanunciada con bombos y platillos y transmitida para solaz del paladar Libertario, hizo vivir a la tenue Democracia Argentina uno de los momentos más difíciles desde la última dictadura militar. El Partido judicial consumó la profecía de Magnetto, y el fallo salió. Nada nuevo, diría Cristina, el Peronismo lo ha vivido a lo largo de su historia. Las fuerzas populares, capaces de resistencia y de amor y gratitud sin fisuras hacia quien les diera la década ganada en dignidad e igualdad de oportunidades, asistieron a una extraordinaria clase pública frente a los Tribunales Federales. Valía la pena escuchar a Juan Grabois, Juan Martín Mena, Manuela Dávila y Anabella Luccardi explicar cómo funcionan el Lawfare, el Poder Real, y la Mafia Judicial, encarnecidos contra nuestra líder. Dicho esto, y porque tenemos futuro y todo por ganar, me permito reflexionar que esta resistencia necesita del ordenamiento al interior del campo popular para construir el proyecto de poder que contenga a todos y todas. Hay mucho por hacer, pensar, proyectar, y es urgente hacerlo, sin egoísmos ni intereses personales. PRIMERO ESTA LA PATRIA. Milei asumió como jefe del Anarco Capitalismo Libertario rodeado de un halo de misterio que tenía que ver, de un lado, con la incredulidad de muchos que suponían que el personaje que encarnaba era una impostura para instalar al che pibe de Eurnekian. Y, del otro lado, algunos tenían cierta esperanza de que pondría fin a un arco variopinto de reclamos que podrían describirse en los Aranceles sobre las Agroexportadoras o las regulaciones y medidas proteccionistas tendientes a frenar la fuga y la timba financiera. Los impuestos a las grandes fortunas y a la Renta extraordinaria, fueron asimilados por los voceros de los multimedios al peso impositivo que ajustaba a una Pyme, o sobre el deseo de vacacionar en el exterior de una familia promedio, y a la economía informal que hace vivir al día a la mitad de la población trabajadora. Hoy el ciclo de Milei comienza a presentar signos de madurez, que obligan al susodicho a subir la apuesta de la desvergüenza. Arrastrado y bufonesco ante un divertido Donald Trump, Milei muestra que es capaz de hundir la tradición nacional respetuosa de los derechos de los pueblos originarios, contra la erradicación de la violencia hacia las mujeres, negacionista de la ultima dictadura, y por sus políticas hacia niños y adolescentes. Con niveles históricos de pobreza e indigencia, desocupación creciente, aumento de la informalidad, cierre de pymes, y la huída de las empresas extranjeras, en Argentina todo se resume a extractivismo y timba, a la espera que los dólares de Trump le den un respiro a este gobierno. Mientras tanto, las organizaciones sociales, gremiales y políticas representativas marchan, se encuentran, se organizan, y traban alianzas. Porque, nadie se salva solo. Solo el pueblo salvará al pueblo.
Etiquetas: cfk democracia lawfare
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