Ante la grave situación económica que azota sin contemplaciones a los sectores más vulnerables, numerosos bloques políticos, instituciones y entidades sociales exigen que el Gobierno asuma la severa crisis que mantiene a un gran porcentaje de la población bajo la linea de pobreza y presionan para que se reconozca de una vez por todas la emergencia alimentaria en la que se encuentran esos sectores. El hambre no espera.